![Foto: X CaroViggiano](https://www.eluniversalhidalgo.com.mx/resizer/v2/DG3EZCEO3FCNLOSL7ZWOW7ZH4E.jpg?auth=60a070c428c3aead8c49abf1059245e49ddf0b050c98c8e9d7e4d751d375398f&smart=true&width=1280&height=946)
Más vale correr
La distancia entre el dicho y los hechos en ocasiones se torna abismal, tal es el caso de la candidata priista Carolina Viggiano, quien a manera de bravata ha buscado encarar a funcionarios y contendientes, sin embargo, cuando le ponen la arena y los guantes, ella pretexta tener agenda llena.
Su equipo de campaña ya había confirmado su asistencia a un encuentro-debate en un centro de enseñanza superior, cuando de repente en un lapsus de miedo, aseguró tener eventos en puerta. Tal parece que la respuesta de la sociedad a su campaña no tiene el efecto que ella pensó y por ello buscará salirse por la fácil.
![Foto: Wikipedia](https://www.eluniversalhidalgo.com.mx/resizer/v2/BISLENLZKJAGDNZIIS7J563KZE.jpg?auth=e940fce39654dae16b35fe73dd01555cd5eea07cbc060027f01eb171206f125d&smart=true&width=1915&height=1149)
Operación rastrillo
La campaña puesta en marcha por la oficina de tránsito y vialidad de Pachuca, denominada Rastrillo y que serviría para limpiar las calles de automotores abandonados, por carecer de principios legales y éticos se han convertido en motivo de reproche ciudadano.
Son distintos y variados los señalamientos de quienes por carecer de recursos no pudieron arreglar sus autos y ahora tendrán que rematarlos como chatarra ante la imposibilidad de pagar el corralón en donde será depositado, pues los citatorios no dan margen de tiempo para buscar alternativas de solución.
![Foto: Especial](https://www.eluniversalhidalgo.com.mx/resizer/v2/OCDXUXI3IJBHHBRUYK6J7IIRCQ.jpg?auth=9a2f7a05410d0ffd8316d5e4c256aa9bd4ab2c417856d11eb136950a5d1149b6&smart=true&width=512&height=266)
Candidatos abusivos
Quienes se exasperan con tanta labor fuera de horario, son los trabajadores de las presidencias municipales en donde sus jefes salieron nominados a un cargo y para ello, “necesitan de su gente” que son justamente los adoloridos burócratas municipales, quienes deben llevar gente a los mítines y alimentarlos a costa de su bolsillo.
Las “órdenes superiores” dicen que no se discuten y deberán acudir con diez personas de su familia a los eventos; utilizar sus redes personales para promover al candidato del jefe y además pagar traslados.