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La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) confirmó la identidad del hombre asesinado y desmembrado cuyos restos fueron esparcidos en diversos puntos de los municipios de Ecatepec, Acolman y Tecámac el pasado 30 de junio. Se trata de José Ramón Leiva Sánchez, originario de Hueypoxtla.
De acuerdo con las investigaciones, José Ramón fue visto por última vez el 29 de junio en compañía de Francisco Jesús Laiza González e Isaí López Rodríguez, en un bar del municipio de Tizayuca, Hidalgo. Los tres habían asistido un día antes a la marcha del orgullo LGBTTTIQ+ en la Ciudad de México y posteriormente se trasladaron al bar “La Cabaña”, propiedad de un amigo en común. La comunicación con ellos se perdió alrededor de las 23:55 horas.
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El 29 de junio, Francisco e Isaí fueron encontrados sin vida dentro de un vehículo en Hueypoxtla, ambos con heridas de bala. El automóvil en el que fueron hallados pertenecía a José Ramón, quien presuntamente los habría trasladado del bar a otro destino.
Francisco Jesús Laiza era una figura pública en Tizayuca, donde se desempeñaba como titular de Obras Públicas y presidía el Comité Municipal del Partido del Trabajo (PT). También fue candidato a cargos legislativos por el PT y el Partido Humanista. En 2020 denunció públicamente amenazas en su contra provenientes de un excandidato a la presidencia municipal.
La desaparición de José Ramón fue reportada el 28 de junio, y tras varios días de búsqueda, sus restos fueron encontrados repartidos en bolsas de plástico negras abandonadas en la vía pública de los tres municipios mexiquenses. En tres de los puntos se hallaron mensajes firmados por el grupo criminal “Nuevo Imperio”, adjudicándose el crimen.
El 2 de julio, autoridades estatales lograron la detención de tres hombres presuntamente relacionados con el homicidio. Uno de ellos, identificado como Gabriel “N”, es un policía municipal activo en Ecatepec. Los otros dos, Oscar “N” y Luis “N”, fueron capturados en San Martín de las Pirámides.
Durante la aprehensión, a los sospechosos se les aseguraron tres armas cortas, dos armas largas, cinco cargadores abastecidos, tres teléfonos celulares, 13 bolsas con cocaína, 14 con marihuana y dos camisetas. Todos fueron puestos a disposición del Ministerio Público.
La FGJEM continúa las indagatorias para esclarecer el móvil del crimen y determinar si existe una conexión directa con el crimen organizado, como lo sugieren los mensajes hallados en la escena.
