Aunque aún se espera la resolución de laudos, el ayuntamiento de Singuilucan prevé destinar una partida del presupuesto de egresos para cubrir estos pagos, lo que afectará y limitará los recursos para obras y acciones, afirmó la alcaldesa Yazmín Dávila.
Reconoció que será necesaria una reingeniería de las finanzas; sin embargo, se proyectan acciones para que la población no resulte afectada en la calidad de los servicios y obras que se ejecuten.
La presidenta municipal señaló que, para la segunda mitad del año, se contempla la consolidación de varios proyectos en materia de agua, rehabilitación de caminos, alumbrado público y reforzamiento en áreas como turismo, cultura y desarrollo agropecuario.
Dávila destacó que el maguey es un elemento que identifica a Singuilucan como “capital mundial del pulque”, por lo que potenciar esta identidad es una de las actividades prioritarias de fomento económico y turístico.
“Va a seguir ese apoyo para que el maguey sea un elemento clave, no solo en el ámbito cultural y tradicional, también en el económico”, expresó.
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Respecto a las plantas de tratamiento observadas desde administraciones anteriores, indicó que no presentan problemas legales, aunque sí en su operatividad.
Sin dar pormenores, explicó que por el momento mantiene pláticas con la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim) para resolver la situación.
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