Ana Luisa Jiménez del Ángel, presidenta del colectivo "La Jauría de Balú", afirmó que, a pesar de que Hidalgo fue pionero en el país al contar con una Unidad Especializada de Investigación en Delitos contra los Animales —creada en 2022—, la violencia hacia los seres sintientes va en aumento.
“Son solo cinco municipios de los 84 que cuentan con un reglamento de protección; solo dos de ellos lo actualizan constantemente: Pachuca y Mineral de la Reforma. La ausencia de normativas ha provocado que ni los primeros respondientes sepan qué hacer ante un caso de maltrato animal”, explicó la activista.
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En entrevista, señaló que el problema radica en ignorar que los animales son seres con derechos, lo que ha derivado en la falta de preparación de las autoridades municipales para atender denuncias. Además, se carece de reglamentos locales que respalden la atención adecuada a estos casos.
Jiménez del Ángel citó como ejemplo la tenencia municipal, que obliga a registrar animales de compañía y otras especies, siempre que las personas cuenten con la capacidad de brindarles sustento por más de 19 años. Sin embargo, esta disposición no se cumple.
“El activismo por la defensa de los animales es una forma de resistencia en favor de una cultura de paz que ayude a reconstruir el tejido social”, puntualizó.
La presidenta del colectivo recordó que “La Jauría de Balú” se fundó en 2016, el mismo año en que se incorporó el concepto de maltrato animal en el Código Penal del estado.
Finalmente, indicó que una de las conductas más recurrentes que afectan el bienestar animal es mantener a los animales de compañía en las azoteas, lo cual compromete su salud física.