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Concesiones de agua para balnearios y la disposición del agua negra para el riego son las reservas que aún tienen la legislación, luego de la aprobación de las reformas a la Ley de Aguas Nacionales y la expedición de la Ley General de Aguas.
Las reservas impactan sobre dos sectores económicos fuertes y del cual dependen miles de familias en el Valle del Mezquital, y otras zonas cuya economía está fincada en el sector primario como lo es la generación de granos y forrajes; así como el terciario: servicios y turismo.
Si bien ya se establecieron los nuevos lineamientos que instruye que ahora la prioridad es el derecho humano al agua, pues las concesiones primero serán otorgadas para el consumo humano y luego para otras actividades productivas, para evitar el afectar al sector del turismo y de recreación con fines terapéuticos se establecieron las reservas en la ley, las cuales posteriormente serán analizadas para que estos sectores no queden desprotegidos, tampoco fuera de la norma.
De acuerdo con la diputada federal Tatiana Tonantzin Ángeles Moreno, entre las últimas reservas se ingresó al pleno el Congreso de la Unión, tras reunión con los ejidatarios y propietarios de los balnearios de Hidalgo, quienes cuentan con concesiones de aguas superficiales, pero también en algunos casos de pozos.
“Primero habló de quienes tienen concesiones de pozos. Ellos igual están completamente salvados, no tienen un solo problema. Nos dijeron: ‘ya tenemos toda la infraestructura de nuestro parque acuático’, pero por circunstancias los dueños cambiaron, el pozo está a nombre de ese dueño; y ahora ¿qué vamos a hacer? Porque tampoco vamos a poder heredar a nuestros hijos?”, cuestionaron en las reuniones que se llevaron a cabo previas a la aprobación.
Sector turismo en Semana Santa alcanzó los 800 mdp.
En la temporada de Semana Santa que reporta la mayor afluencia para el sector económico terciario, es decir, el turístico y de servicios, en Hidalgo alcanzó una derrama de 800 millones de pesos y 650 millones de pesos en las vacaciones de verano.
Los balnearios hidalguenses que cuentan con agua termal de hasta 38 grados y que incluso algunos son considerados como benéficos por sus efectos terapéuticos, son uno de los principales atractivos para el turismo interestatal, procedente principalmente de la zona metropolitana del Valle de México por su cercanía. En la entidad hay más de 70 parques acuáticos y balnearios registrados ante la Asociación estatal.
Uno de los municipios con mayor atracción de visitantes es Ixmiquilpan que con sus parques acuáticos y balnearios ( al menos 16) alcanzó en el periodo de Semana Santa una derrama económica de 285 millones de pesos; Tecozautla alcanzó los 112 millones de pesos, y generan al menos 15 mil empleos directos.
La economía social de los balnearios en el Valle del Mezquital refiere uno de los sectores más dinámicos, pues es la industria sin chimeneas y que en su mayoría está integrada por ejidatarios, comuneros o socios a través de empresas cooperativas indígenas. Sin embargo, la preocupación por sus concesiones se mantiene tras la aprobación de las reformas a la Ley de Aguas Nacionales y la expedición de la Ley General de Aguas.
Al respecto, en la Gaceta Parlamentaria publicada el 03 de diciembre pasado, se inscribe que quedan en reserva los artículos 82 y 88 de la Ley de de Aguas Nacionales la determinación de que será posteriormente cuando se aborde el tema en el Congreso de la Unión.
En el documento presentado por diputados hidalguenses de la fracción de Morena, se justificó que la ley vigente no expide concesiones para el sector turismo al tratarse de una zona en veda de agua (Acuífero del Mezquital); sin embargo, es la actividad turística de miles de pobladores que poder años han construido ya su infraestructura y no afectan al consumo humano.
“Para el caso del uso acuícola, turismo, recreación, y fines terapéuticos, se otorgarán concesiones, registro y/o permisos, siempre y cuando realicen explotación de aguas nacionales mediante aprovechamiento de paso; con independencia de cualquier instrumento administrativo que limite el aprovechamiento de las aguas nacionales”, se describe.
Y se añade el caso de la acuicultura, uno de los sectores económicos que en Hidalgo desarrollan y viven cientos de familias, pues es el segundo productor nacional de tilapia en agua dulce.
El Acuífero Mezquital se encuentra en veda desde dos décadas atrás, luego de que es una reserva subterránea de agua cercana al Valle de México, y la cual se recarga justo con las aguas residuales tanto de balnearios como de la agricultura que existe en la zona, según refiere el estudio Balance hídrico y calidad del agua en el acuífero del Valle del Mezquital, publicado en la Revista Mexicana de Ciencias Geológicas.
A diferencia de la zona metropolitana de Pachuca, los municipios del Valle del Mezquital e incluso del Alto Mezquital tienen acceso, y aunque la mayoría es extraída de pozos la organización comunitaria por décadas permitió la construcción de redes de suministro e incluso el tandeo.
Regulación de agua de riego entre los temas pendientes aún por legislar
A decir de la diputada federal Tatiana Tonantzin Ángeles Moreno, el agua negra para riego (y blanca o de presa) que se distribuye en distritos como el 102 de Ajacuba, 003 de Tula y 100 de Alfajayucan será otro tema por discutir con posterioridad, pues si bien se encuentra la normatividad en la Ley de Aguas Nacionales, aún tiene reservas por discutir y consensuar con los productores del campo, sobre todo por el tema administrativo y de distribución.
En este sentido, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales refiere la necesidad una legislación actualizada en torno al tratamiento y uso de aguas residuales, que impactan directamente en zonas agrícolas como en el caso de los distritos de riego del Mezquital, pues en el resto de la entidad, el riego es con agua de presa, colectada por las lluvias principalmente.
Afuera de San Lázaro, en el Congreso de la Unión, productores de Francisco I. Madero se apostaron junto con los agricultores de otras entidades que reclamaban cambios en la nueva legislación. Para los campesinos locales, usuarios de agua negra, la exigencia es regulación en los módulos de riego, pues son asociaciones civiles quienes generaron un monopolio del agua y los cacicazgos en la región.
Bajo interés en ponerse al corriente con las concesiones de agua en Hidalgo
El pasado 30 de octubre, el Comisión Nacional de Agua, dirección estatal, presentó un programa nacional para la regularización de las concesiones, luego de que de las 6 mil 500 existentes en territorio estatal, 28.5 se encontraban vencidas, es decir, mil 853 no se refrendaron en tiempo y forma, por lo que están en riesgo de perderse.
Entre los no regularizados incluso había las que operaban organismos de municipios como Huejutla, Molango, así como productores agrícolas del Valle del Mezquital.
A mes y medio del anuncio, Félix Brambila Mendoza, director local de la Conagua, informó que la respuesta es muy baja aún, pues con dos oficinas habilitadas para tal fin, Ixmiquilpan y Pachuca, los propietarios de los permisos para usufructo del agua es escaso y se espera que pronto se avance con las renovaciones pendientes.
En Hidalgo, entre los sectores por actualizar su concesión, están en un 70 por ciento los de uso agrícola y en su mayoría se ubican en el Valle del Mezquital, seguido por los de uso urbano.
Hasta un 70 % de concesiones son de uso agrícola, la mayoría a cargo de ejidos.
De acuerdo con la Conagua, en la entidad también se tiene detectado el robo de agua. En tres casos intervino la Fiscalía General de la República: uno en Actopan, otro en Tulancingo y uno más en Mineral de la Reforma.
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