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En el Pueblo Mágico de Huasca de Ocampo no todo es bosque encantado y leyendas de duendes. A escasos minutos del centro, el paisaje cambia radicalmente hacia montañas semidesérticas que esconden una joya para los amantes de la adrenalina: el parque Peña del Aire, ubicado al borde de un impresionante barranco.
Este paraje forma parte de dos tesoros naturales de México: la Reserva de la Biósfera Barranca de Metztitlán y el Geoparque Comarca Minera, una distinción otorgada por la Unesco que sólo comparten dos sitios en todo el país.
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En medio de un terreno árido y vistas sobrecogedoras, el parque ofrece una variedad de experiencias extremas. Desde un columpio que se balancea sobre el abismo hasta bicicletas suspendidas en el aire, tirolesas, rappel y un reto de equilibrio en las alturas.
La Peña que da nombre al parque es una formación de origen volcánico que, por su peculiar forma, parece flotar sobre el vacío. Se encuentra en el ejido San Sebastián La Barranca, a más de mil 900 metros sobre el nivel del mar y a tan sólo 35 minutos en auto desde el centro de Huasca. Desde Pachuca el trayecto es de poco más de una hora y desde Ciudad de México, aproximadamente dos horas y media.
El columpio extremo es la atracción más viral del parque: una estructura anclada al borde de la barranca que alcanza una altura de mil 200 metros. Además, hay una tirolesa de 400 metros de largo a la misma altura, así como una versión infantil de 50 metros de longitud y dos de altura.
También se puede montar una bicicleta aérea de 250 metros de largo suspendida a 150 metros del suelo o enfrentarse a una caminata sobre un cable de acero que desafía el vértigo. Para quienes buscan otro tipo de reto, hay zonas habilitadas para practicar rappel en formaciones rocosas naturales.
Peña del Aire también ofrece tres rutas de senderismo: una hacia el borde del precipicio, otra hacia el fondo del cañón para explorar el río Metztitlán, y una caminata nocturna que incluye observación astronómica con telescopios.
Las vistas desde cualquier punto del parque son espectaculares: montañas, barrancos y el paso del río entre gigantes de piedra.
El acceso general al parque cuesta $30 pesos por persona. Las actividades tienen tarifas independientes: bicicleta aérea ($250), rappel ($200), columpio extremo, tirolesa y caminata nocturna ($150 cada una), y actividades como el reto de altura, minitirolesa y senderismo ($100 cada una).
Para quienes desean una experiencia más inmersiva, es posible acampar por $100 pesos por persona, aunque es necesario llevar equipo propio.
Más información sobre horarios, reservaciones y servicios está disponible en las redes sociales oficiales: Facebook “Parador Turístico Peña del Aire” e Instagram @penadelaire.
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