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A menos de tres horas de la Ciudad de México, el Parque Nacional El Chico alberga uno de los destinos más encantadores para quienes buscan aventura, descanso y contacto directo con la naturaleza: Rocabosque, un complejo ecoturístico que combina cabañas acogedoras, restaurante con vista al bosque y excursiones diseñadas para explorar los rincones más espectaculares de la región.
Entre sus actividades más populares se encuentra la caminata hacia la peña Las Monjas, un geositio perteneciente al Geoparque Comarca Minera, famoso por su peculiar silueta y las leyendas que la rodean.
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Se dice que la imponente formación rocosa es el resultado de la petrificación de una monja que decidió abandonar el pueblo, convirtiéndose en piedra como castigo divino.
El recorrido abarca alrededor de cinco kilómetros que se completan en unas tres horas, atravesando senderos rústicos pero bien señalizados. Durante el trayecto, los visitantes disfrutan de paisajes boscosos cubiertos por neblina, un ambiente místico que acompaña cada paso hasta llegar a la cima.
La recompensa final está a unos 2 mil 800 metros sobre el nivel del mar, donde se abre un mirador natural con panorámicas impresionantes del Parque Nacional El Chico.
La experiencia puede realizarse durante el día por $250 pesos por persona, o bien, en una versión especial al amanecer por $300 pesos, ideal para quienes buscan ver despertar el bosque entre tonos dorados y bruma matutina.
Rocabosque se consolida así como un imperdible para los amantes del ecoturismo y las experiencias que mezclan naturaleza, historia y leyenda en un mismo escenario.
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